A lo largo de mi experiencia como profesora de inglés, he podido comprobar cómo dentro de grupos de personas que habían sido expuestas a las mismas "técnicas" de aprendizaje, con las mismas figuras docentes y los mismos materiales didácticos, existía una clara diferencia en el grado de habilidades adquiridas.

Lo primero que llamaba mi atención era lo poco personalizada que estaba la presentación de algo nuevo. El 90% del material didáctico estaba diseñado para personas con un sistema representacional predominante visual y eso dejaba fuera a parte de mi alumnado. Así que me esforcé en crear material que llegara a todos/as y que ampliara sus mapas cognitivos ofreciéndoles opciones más allá de su canal predominante. Así combiné movimientos con sonidos, construcción gramatical con formas geométricas de colores y una fonética que venía de la selva.

En mi primer día de formación como docente aprendí que nuestra primera misión como facilitadores era construir sintonía con el grupo y para ello identificar los modelos de aprendizaje a través del cuestionario VARK. Debíamos ceder el protagonismo al alumnado, convirtiéndonos en facilitadores de herramientas más que "transmisores de conocimientos".

Esto, más adelante, me llevó a explorar qué espacio había en este campo para incorporar "técnicas" de PNL. Empecé diseñando materiales que mostraban un mismo elemento a través de los tres sistemas representacionales, definir objetivos individuales y como equipo y acompañarlos en la búsqueda de una motivación intrínseca. Todo esto dirigido a mejorar la experiencia de aprendizaje. Genial, pero se podía hacer más.

La identificación de canales predominantes permite identificar cuáles son los "territorios inexplorados" de cada estudiante. La definición del objetivo debería dotar de un sentido al proceso y la motivación debería ser la gasolina del metaobjetivo. Pero en España, en algunos círculos, el objetivo que tienen interiorizado la mayoría de los estudiantes es aprobar. Y ese objetivo no da mucho juego si no le das un par de vueltas.

Esto me ha llevado ahora a proponer un modelo integrando algunos aspectos más de la PNL como la identificación y cambio de creencias, el uso del metalenguaje por parte del docente y el diseño de "drills" (ejercicios de repetición) con frases que generen creencias potenciadoras. También se pueden utilizar sugestiones Eriksonianas dentro de ejercicios de comprensión oral y recrear - en la medida de lo posible - el entorno en el que se produciría esta comunicación.

Sonia Callejas Martín

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