Este post es una continuación de cómo hace unos años aplicamos el proceso de Design thinking para crear un programa de prevención del abandono escolar en el segundo ciclo de Educación Secundaria.

3.Generar y refinar ideas

Estaba claro que después de entrevistar a alumnos/as, docentes y familias, cada uno de ellos iba a precisar una intervención y estas fueron las ideas que generaron oportunidades.

4. Experimentar

Planificamos varios eventos en el espacio de dos semanas:

• Para los docentes de nuestro centro organizamos un taller destinado a compartir las emociones y creencias de cada grupo (alumni, familia y docentes) y diseñamos una intervención en tres áreas:

1. Inteligencia emocional: dedicar los 10 primeros minutos de clase a compartir lo que traemos al aula para identificar qué puede interferir en el proceso de enseñanza-aprendizaje y cómo podemos gestionarlo. Cada alumno/a reflexiona y el grupo aporta ideas creativas.
2. Innovación educativa que fomente la curiosidad y autonomía: plantear varios temas del currículo a ver en la semana y generar lluvia de ideas sobre cómo queremos aprenderlo. Utilizar el flipped classroom, aprendizaje por proyectos etc.
3. Uso del cuadernillo para los que forman parte del programa. En el que van registrando experiencias, sensaciones, aprendizaje y los profesores pueden acompañarles a definir objetivos académicos semanales.

• Para las familias organizamos una presentación del programa piloto dónde compartíamos los enfoques y el grado de implicación que requería por cada uno de los agentes implicados.
• Para los estudiantes que no participaban en el programa de coaching cada tutor recogía feedback sobre el efecto de los cambios implementados. 

Y comenzaron las sesiones de coaching semanales con los/as chicos/as y quincenalmente con las familias

5. Evolucionar iterando

Tras implementar el programa "piloto" durante las clases de verano aprendimos que:

• El aspecto más valorado por los jóvenes fueron las sesiones de coaching, en especial las técnicas sencillas de Programación Neurolingüística que les permitían proyectarse sensorialmente en su futuro. También las sesiones con su familia dónde habían encontrado formas de escuchar y expresar utilizando el protocolo de Comunicación no violenta.
• Para las familias fue un descubrimiento utilizar las posiciones perceptuales para empatizar con sus hijos/hijas y con el profesorado. Aprendieron a conectar con sus necesidades, identificar creencias limitantes y encontrar una nueva forma de acompañar desde los límites y el afecto.
• Para los profes fue un gran reto el abrir un espacio de contención emocional en el aula y atreverse a gestionar acompañando los estados de los adolescentes.

Este prototipo sirvió de inspiración para crear este proyecto y compartir con otros profesionales las posibilidades de acompañar a nuestros alumnos/as, a sus familias y a nosotros mismos hacia un paradigma educativo centrado en las personas. Te animamos a conocernos y probar nuestras propuestas.

Sonia Callejas Martín

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